Un ser normal dentro de la anormalidad

Son ya casi Las siete de la tarde, En este silencio Todo retumba No hay sonido Que me llame al aula, Hoy otra vez No hay biblioteca No ingresas Al vacío salón Hace tiempo ya Mis recuerdos Me llevan a ese instante, Donde aliviado me sentía Al verte entrar Quiero que sepas Aún me cuesta Sonreír Para los de afuera Pero ya aprendí A conjugar verbos, De morfología Y de prosas también sé Pero no me enseñaste Tal vez Se te olvidó O quizás No quisiste, Enseñarme A no extrañar el aroma A yerba recién cebada A hojas reutilizadas, Impresas por las noches Y de prisa Igual sé Que tu mejor legado  Fue: Ante cada problema  En la vida, Será en las letras Dónde encuentre mi guarida.

Aquí me encuentro En una trinchera Ya gastada De aguantar La balacera De los recuerdos, Mi memoria Que no ayuda Caen como bombas Las imágenes De estar  A tu lado Soy un soldado Temeroso, Del amor Que ha muerto Exclamo por dentro El fin  De esta guerra, Que se retiren Estos tanques Que huelen  De la sangre Inocente  De mi corazón

He nacido Crecido sin rumbo, Para mi La calle es el mundo Donde consigo Aquello que me rescata, De la triste realidad Sólo los que la viven Saben bien De que se trata Que se siente Cuando estás ahí Y te ignoran, Igual existo Aunque nos traten  Como de ellos Su escoria Aquí se sufre Pero debo aguantar, Parado de manos Si es necesario Sino podré conocer En cualquier esquina Otro peor calvario Que te lleven Corremos el riego De no volver, ¿Calabozo  O cementerio? Es la suerte De los guachis La que lo irá a resolver.

Mientras todos amanecen ella  aún no se ha acostado, El boliche donde trabaja cierra  con el último trasnochado Camina toda la ciudad con tacones  de punta, Todos con recelo  la observan, a su paso  más de uno le susurra  Otros la esquivan pero por las noches  la usan, Su hogar  es el único lugar donde no se siente  una intrusa Al llegar ella se desviste como tantas  otras veces, Pero ahora  no es por el billete, que hace de su vida  un vicioso molinete Gira toda la noche  en el bar se ofrece  entre clientes, Nunca detiene su andar colecta metal  entre su vientre Por las noches  se vuelve famosa en el día  la hacen invisible, A esta dama la recuerdan siempre y cuando  sea cogible.